Empezando…
Posted 14 septiembre, 2015
on:La escuela empieza de nuevo… y eso a veces cuesta un poco. Sobre todo a niños y niñas más pequeños. He aquí algunos síntomas que a veces podemos encontrarnos. No se trata de agobiarnos por ellos, sino de entenderlos y poder ir ayudándoles a superar este momento.
Inicia el estrés infantil. Síntomas del regreso a clases
Se acerca el regreso a clases y es frecuente que los niños presenten dolor de cabeza o de estómago sin una razón aparente y se sientan ansiosos, esta es la forma más frecuente que tienen para expresar su angustia ante el inicio de un nuevo ciclo escolar.
Señales en los niños
- Dolores de cabeza o estómago
- Comportamiento de aferramiento a estar con los padres
- Se vuelven irritables
- Muestran tristeza
¿Por qué sufren?
- Cambios de horarios (despertar, tareas y disciplina)
- Por la separación con los padres
- Por temor a no cumplir con las expectativas familiares
- Por lo nuevo (escuela, compañeros o maestros)
- Por la aceptación social
- Experiencias previas no gratas
Lo que pueden hacer los padres
- Establecer horarios (baño, cena, sueño) una semana antes de clases
- Escuchar sus temores, dudas, intereses y expectativas con mucha atención y orientarlas
- Invitar a algunos compañeros a la casa, para que recuerde su ámbito escolar
- Hacerlo participe en la compra de útiles, libros y uniformes
- Hacer un calendario para indicar los días que faltan para el regreso
- Que el niño enumere las cosas positivas de ir al colegio
- Reactivar sus conocimientos previos de 10 a 20 minutos diarios
Alerta: Los padres deben vigilar los cambios extremos en la conducta del niño, ya que en algunos casos los niños pueden sufrir de bullying escolar (acoso o maltrato).
No olvidemos:
- No mostrar nosotros angustia y agobio. En general, es algo pasajero, y cuanto más nerviosos nos pongamos nosotros, más durará.
- No negar sus sentimientos, decirles cosas como «Es normal que te sientas así… a todos nos pasa…» esto les tranquiliza.
- Pero no dar excesiva importancia a la situación. Pasará.
- Darle más cariño, pero sin hablar del tema. Estar más con ellos, abrazos…
- Si en momentos nos rechazan, entender que es lo normal; es su forma de expresar su malestar por la situación.
- No estar hablando todo el rato de ello.
- No dejarles en casa por sus «males». En la infancia tendemos a somatizar. Si les dejamos podemos entrar en una espiral muy peligrosa…
- Si la situación dura o os sentís desbordados, hablad con el tutor o tutora. Os ayudará de mil amores…
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